El 25 de mayo se celebra el Día de África, una fecha reconocida por la Unión Africana y respaldada por la ONU como un momento para destacar la riqueza cultural, el ingenio y la visión de futuro del continente. Más allá de las conmemoraciones tradicionales, es una oportunidad para celebrar los aportes diversos de África al mundo contemporáneo, desde la tecnología hasta las artes.
Un continente que innova y transforma
África ha sido cuna de soluciones que han redefinido industrias enteras. El Mobile Banking, desarrollado inicialmente en África Oriental, transformó la inclusión financiera para millones. Científicos del continente han contribuido a tecnologías médicas clave como la tomografía axial computarizada (TAC), y fue en Sudáfrica donde se realizó el primer trasplante de corazón humano en 1967.
Las mujeres africanas, reconocidas por su liderazgo y resiliencia empresarial, son una fuerza económica fundamental. El continente alberga algunas de las tasas más altas de emprendimiento femenino del mundo, impulsando cambios sostenibles en sus comunidades.
Artes africanas: creatividad con impacto global
La proyección internacional del arte africano continúa creciendo de manera sostenida. Las obras de artistas del continente han superado los 100 millones de dólares en ventas globales, mientras que la música africana ha ganado un protagonismo sin precedentes, con un aumento de más del 22% en su presencia dentro de la industria global. Se espera que esta cifra supere los 300 millones de dólares en ingresos para 2026.
Asimismo, las industrias audiovisuales africanas —de Nigeria a Sudáfrica, de Marruecos a Kenia— están dejando una huella firme en los festivales más importantes del mundo, como Cannes, Berlinale y Toronto, y han logrado posicionarse incluso en los premios Oscar, consolidando la narrativa africana como parte esencial del panorama audiovisual global.
Angola, PALOP y más allá: una celebración pan-africana
Los cinco Países Africanos de Lengua Oficial Portuguesa (PALOP), como Angola, constituyen una minoría en el contexto general, dado que el enfoque de las conversaciones más mediáticas, tanto a nivel regional como internacional, suele centrarse en los países de lengua oficial inglesa, francesa, árabe o suajili. Sin embargo, Angola, Cabo Verde, Guinea-Bisáu, Mozambique y Santo Tomé y Príncipe representan a más de 77 millones de personas en África, lo que equivale al 30 % de la población mundial lusoparlante. Estos países aportan contribuciones de alto impacto regional e internacional, incluyendo fenómenos virales que unen a la humanidad a través de la música y el baile, como ocurrió con la coreografía del colectivo angoleño Fenómenos do Semba al ritmo de la canción sudafricana “Jerusalema” del DJ Master KG y la vocalista Nomcebo.
El impacto global en la industria musical incluye géneros como la morna caboverdiana, ya reconocida como considerado Patrimonio Cultural de la Humanidad y destacada en películas galardonadas con el Óscar. También se reconoce al semba de Angola, considerado la raíz del samba brasileño, así como a géneros más recientes como la kizomba y el kuduro, originados en Angola e influyentes en estrellas internacionales como Rihanna, Maluma, Anitta, JBalvin e incluso Madonna. Asimismo, el afro-house, desarrollado por DJs de Angola, Mozambique y Sudáfrica, continúa ganando reconocimiento mundial con sus ritmos y coreografías, inspirando a artistas como Beyoncé y Pedro Sampaio, entre muchos otros.
Más allá del pop internacional, la música electrónica y los ritmos urbanos mainstream, los creadores de los PALOP traspasan fronteras y promueven una representación africana holística dentro y fuera del continente. De hecho, el primer Pabellón Africano en la Bienal de Venecia en 2007, comisariado por Simon Njami (Camerún) y Fernando Alvim (Angola) fue resultado de una iniciativa impulsada por colecciones de arte privadas angoleñas. Estas colecciones albergaban, en ese momento, uno de los mayores fondos de arte panafricano de propiedad africana con sede en el continente.
En las industrias de la moda y la belleza, destaca el papel de una nueva generación de modelos como Maria Borges (Angola), Alécia Morais (Cabo Verde) y Amilna Estevão (Angola), quienes se atrevieron a desafiar los cánones establecidos al promover el cabello natural en las pasarelas internacionales hace casi una década. Gracias a su autenticidad y valentía, impulsaron una visión más inclusiva de la belleza, abriendo camino a futuras generaciones de modelos africanas.
África se compone de 54 naciones y sus diásporas, unidas por una historia compartida y un presente en constante evolución, caracterizado por la creatividad y el potencial. Hoy, el continente celebra su diversidad, su talento y su capacidad para influir positivamente en el mundo a través de la innovación, el arte, la ciencia y la cultura.
Hoy, África celebra su diversidad, su talento y su capacidad para influir positivamente en el mundo desde la innovación, el arte, la ciencia y la cultura.
¡Feliz Dia de Africa !